Las tres hermanas participaron en una red clandestina que ayudó a los judíos a escapar de los nazis. Mediante una red clandestina, los escapados llegaban a Ribadavia en tren y las hermanas Touza les conseguían un refugio seguro hasta que los taxistas Javier Míguez y José Rocha les trasladaban hasta Portugal. "Sospechamos que tenían un contacto en Renfe y también contaban con un obispo Evangelista llamado Ricardo Pérez, que ejercía de traductor con la gente que escondían’, apuntó Camilo Touza.
|
etiquetas: touza , ribadavia , portugal , red clandestina , fugas , guerra mundial