Cuando cada vez te sientes más avergonzado de tu país, y desprecias absolutamente el significado de todas las banderas, resulta difícil disfrutar de un espectáculo basado en símbolos nacionalistas. El grandioso mosaico formado en el Nou Camp sin duda fue emocionante para muchos catalanes. Me alegro por ellos. Viendo las imágenes de sor María Dolores de Cospedal el domingo en Roma, vestida de negro cucaracha, tengo que reconocer que en Castilla La Mancha quizá no podemos dar clases de universalidad, modernidad y progreso.
|
etiquetas: independencia , partido , futbol , madrid , barça , cospedal