Me ha costado mucho escribir este artículo porque no quiero parecer irrespetuosa con las personas que confían y creen en la iglesia católica, pero han sido tantos los acontecimientos que la han tenido como protagonista durante las últimas semanas y meses que, verdaderamente, no puedo permanecer callada más tiempo teniendo la posibilidad de escribir esta columna en la que hago públicas mis reflexiones.
|
etiquetas: iglesia , inmatriculaciones , abusos , laicismo