Para Michael Carrol las discusiones con su esposa eran cada vez más intensas y prolongadas lo que le obligó a dejar su domicilio en la ciudad de Manteca, California, usando la camioneta familiar. Fue entonces que su señora no tuvo mejor idea que amarrarse a la capota del vehículo para evitar que su marido se vaya. Sin dudarlo, Carrol arrancó el auto y manejo casi 56 kms a más de 160 kms por hora hasta llegar a Pleasanton, donde alguien se percató del hecho liberando a la mujer, quien fue llevada a un hospital por presentar cuadro de hipotermia.
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