Fui un estudiante nefasto, y la cosa no mejoró con mi incorporación al mundo laboral. Cuando en una entrevista de trabajo me preguntan cuáles son mis puntos fuertes, no sé qué responder; en cambio cuándo me preguntan por mis defectos, les digo si quieren que los ordene cronológica o alfabéticamente. Nací en un barrio de mierda con más hormigón por metro cuadrado que la densidad de cualquier agujero negro supermasivo. Asiduo de menéame, así como de otros sitios de mala fama.
Creo que el momento cumbre de mi vida puede ser este pregúntame. Estoy ansioso por decir que a la cebolla se le puede añadir una tortilla con patatas.