Así que cuando alguien busca “fotos de perritos”, Google entiende que también puede estar interesado en “fotos de cachorritos” y que “hervir agua” implica que el agua esta caliente. El problema es que el algoritmo llegó a la conclusión de que un perrito caliente era lo mismo que un cachorrito hervido. [Traducción de lo más destacado del pasado artículo de Wired.]
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