Gemma Montull, la hija del número dos del Palau de la Música, reclama judicialmente 60.000 euros por despido improcedente, que se produjo al poco de airearse las irregularidades en la institución. Montull declaró en el juicio que fue personalmente a cobrar 3,2 millones de euros en efecto "en calidad de conserje", aunque su cargo oficial era de directora financiera, por el que cobraba 8.500 euros mensuales. El Palau de la Música, además, le regaló a Montull la reparación de su vivienda particular y un Porsche.
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