Puede parecer un asunto baladí, pero yo creo que no es así. En mi caso concreto llevo con mi mujer desde los 20 años, y ahora ya hemos pasado la cuarentena. Es evidente que el paso del tiempo no perdona a nadie y tanto ella como yo hemos envejecido y físicamente ya no somos lo que fuimos en su día. Sin embargo, al menos en mi caso, ocurre una cosa: yo sigo queriendo mucho a la que es la madre de mis hijos y con la que he compartido la mitad de mi vida...pero sencillamente es que cada vez me "pone" menos. Es algo instintivo que no puedo controlar.
Y no creo que mi caso sea único, ni tampoco marginal, y es algo que me preocupa bastante. Porque por una parte no quiero ofenderla ni mucho menos engañarla, pero por otra es que simplemente mi atracción sexual hacia ella va decayendo cada año que pasa. Además es algo que no puedo ocultar. Cuando antes era una babosa que no la dejaba tranquila, hoy se me nota que intento en lo posible alargar los periodos en que tenemos relaciones, y muchas veces, no me da vergüenza reconocerlo, prefiero el "apaño" manual usando vídeos de internet.
Y no digo que a ella no le ocurra algo similar conmigo, pero la cuestión es que yo aún me siento sexualmente activo (por desgracia hacia otras mujeres más jóvenes). Si intentamos generalizar el asunto, ¿qué se supone que debería hacer cualquier persona ante una situación semejante? ¿Continuar con el teatro y hacer lo que se pueda hasta que la "muerte nos separe"? Quizás esa solución sea la más ética o moral pero también es la más "injusta" hacia mi persona puesto que me privará de disfrutar al 100% de mis relaciones sexuales.
Por otra parte si intento hablar con ella del asunto, primero seguro que la ofendo (lo mismo que si ella me dijera a mí lo mismo), y segundo es que no veo solución: el tiempo pasa y todos envejecemos, y no creo que hablarlo la vaya a hacer rejuvenecer. Tampoco es en mi caso personal posible (ni quizás ético) que mi mujer acceda a que yo eche esporádicas "canitas al aire" con otras mujeres. Y como digo tampoco quiero dejar a mi mujer porque siento que le debo fidelidad por todo lo que hemos pasado juntos y porque la sigo queriendo.
En fin. Abro este hilo porque es un asunto que probablemente le habrá pasado a más de uno y sería interesante conocer vuestra opinión (y vivencias), pero siempre desde el respeto y sin montar un debate tipo forocoches.