A ver, señora Aído. Cómo se lo explicaría para que lo entienda, soy mujer de treintaitantos, nunca me he sentido discriminada, porque afortunadamente muchas mujeres antes que yo estuvieron luchando de verdad por conseguir unos derechos fundamentales, que no consistían precisamente en que se diga miembro o miembra; nunca me he sentido ninguneada porque un hombre me abriera una puerta o me dejara pasar antes, ni supongo que mi compañero de trabajo va a cobrar más...
|
etiquetas: feminismo , opinion , aido