El IBI de Gandía subirá en los próximos tres años un 25%. De 55 a 65 trabajadores municipales, entre interinos, personal laboral y cargos de confianza, perderán su empleo. En los próximos 10 años no se podrá incorporar nuevo personal, las bajas por enfermedad no se cubrirán y las horas extraordinarias y la productividad se reducirán al mínimo y el IVTM subirá un 25 % el año que viene y las tasas y precios públicos de la mayoría de los servicios que presta el consistorio se tendrán que incrementar paulatinamente.
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