El tres se antojaba un número mágico para Isidro Lángara. Fue estrella de la Liga española los tres años que la disputó. Se convirtió en el primer jugador en marcar tres hat tricks—tres goles en un partido— en tres jornadas consecutivas. Se las arregló para ser el primer delantero del mundo en convertirse en máximo goleador de tres Ligas diferentes —la española, la mexicana y la argentina— y, finalmente, tres fueron los dictadores que hubiesen deseado verle muerto.
|
etiquetas: futbolista , lángara , franco , hitler , mussolini , dictadores