Empezamos mal, lo sé. La detestable herencia de 2012 proyecta una borrasca de negros nubarrones sobre nuestras cabezas. Hemos dado sangre, sudor y lágrimas, a cambio de más sangre, de más sudor y de más lágrimas, pero todavía quieren más, aún dicen que no es suficiente.
|
etiquetas: feliz año , año nuevo , 2013 , almudena grandes