El caso de Lorena Celayes es verdaderamente extraño. “El 4 abril, cuando recibí el documento después de dos años de renegar, me sentí feliz, pero me quise morir cuando vi que la foto y la firma eran los de otra persona. Ahora debo presentar el formulario 5, que provee la Junta Electoral y la partida de nacimiento, para certificar quién soy y recibir un DNI correcto”. Le dijeron que deberá esperar un mes más. Sin documento no puede cobrar su sueldo, salir del país, hacer trámites bancarios o inscribirse en una obra social.
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