La historia la recoge hoy el diario Liverpool Echo: un niño de 12 años ha sido expulsado por un día de su escuela, donde están prohibidas los aperitivos grasos y las bebidas azucaradas, por haber vendido a un compañero un paquete de "snacks". El alumno era reincidente, ya que le habían pillado en otras ocasiones "traficando" con chocolatinas y patatas fritas [ENG].
|
etiquetas: educación , sociedad , reino unido