La crisis económica ha propiciado un repunte de los expedientes de regulación de empleo (ERE) y de los despidos, dos fórmulas a las que recurren las empresas para reducir plantilla, cuando no se ven abocadas a echar el cierre. Según confirman expertos en derecho laboral, esta situación se debe a que las firmas gallegas recurren en mayor medida a los ERE que a los despidos individuales para evitar la judicialización de estos redimensionamientos de plantilla y las indemnizaciones que conlleva la segunda opción.
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