edición general
9 meneos
48 clics

El último afilador

“¡El afilador!”, el grito de Tomás López, unido al sonido de su característico silbato o ‘chiflo’, es toda una invitación para realizar un viaje en el tiempo. Lleva dos días en Huesca, a dónde ha llegado desde su tierra natal, Orense, “tierra de afiladores, ‘la terra da chispa’, la llaman”, recuerda, orgulloso, después de haber recorrido con su bicicleta y una pesada mochila, Asturias, Cantabria y el País Vasco.

| etiquetas: afilador , tomás lópez

menéame