c&p-Hace apenas unos meses, un viejo satélite ruso a la deriva chocó contra otro norteamericano de telecomunicaciones. Ambos quedaron destruidos y miles de sus fragmentos formaron una nube de chatarra que rápidamente se sumó a la ya existente en la órbita terrestre, aumentando así el peligro de que se produzcan nuevas colisiones.
|
etiquetas: mollones , kilos , basura , espacial , tierra