En la tarde del 3 de noviembre de 1893, la voz de que un barco ardía en el muelle de Maliaño corrió como la pólvora por las calles de Santander y buena parte de la población acudió en masa al muelle dispuesta a no perderse un espectáculo tan espeluznante como poco habitual: amarrado al muelle, un buque ardía por los cuatro costados lanzando al aire una espesa columna de humo negro adornada por rojísimas lenguas de fuego. En su popa, estampado en grandes letras doradas, aparecía el nombre del desdichado buque: Cabo Machichaco.
|
etiquetas: santander , desastre , cabo machichaco , explosión , halifax , dinamita