La eficiencia se ha convertido en la palabra más empleada por los cargos con alguna responsabilidad en la administración pública. En tiempos de crisis, recortar gastos es la máxima prioridad presupuestaria para cuadrar las cuentas. Sin embargo, las administraciones arrastran en algunos casos importantes deudas que lastran la gestión actual y la de los próximos años. Es el caso del hospital Clínico de Salamanca, cuyo desfase de 188 millones de euros durante los últimos años serviría para pagar 626 años de las guardias a suprimir en la comarca de
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