Me siento en estado de Kao, de impotencia, de triste espectador de unos hechos contrarios a mis derechos cívicos, humanos, sociales, de persona por el simple derecho de serlo. Miro a mi alrededor y no hay nada que pueda estimular este decaimiento ante el paro creciente, creciente pobreza,fuerte aumento de la exclusión social, destrucción de empresas a doquier, -cada día las mejores firmas se van uniendo a este rosario destructor de esperanza-. Una "conformidad cómplice con la tragedia" se va apoderando de uno, se va convirtiendo uno mismo
|
etiquetas: opinión , política , sociedad , análisis social , reflexiones