Las personas que reciben una recompensa monetaria por abandonar su adicción tienen tres veces más posibilidades de conseguirlo que aquellas que no reciben este estímulo. La salud no es el mejor incentivo para abandonar la adicción al tabaco. Así lo han demostrado los 878 empleados de la multinacional General Electric, la tasa de éxito fue tres veces superior en el caso de los trabajadores "motivados con 750 dólares ", que los que no recibieron nada a cambio.
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