Una cosa es "embellecer" una imagen para que se vea más bonita y espectacular. Pero ultimamente, las maravillas de la tecnología han permitido abusos que convierten rostros reconocidos en caras o cuerpos casi irreconocibles. Tal sería el caso del cartel de "Salt", la nueva película de Angelina Jolie. La superestrella luce un ejemplo de cómo ser "photoshopeada" en exceso, a tal punto que los más ácidos medios norteamericanos dicen que el slogan "¿Quién es Salt?" debería ser cambiado por "¿Dónde está Angelina Jolie?".
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