No, ni tampoco a los bancos en crisis. El Gobierno sólo debe ayudar al ciudadano. Por cierto, cuando una inmobiliaria entra en suspensión de pagos, se ponen a la venta sus activos de forma reglada, e incluso se puede salvar de la quiebra. Activos minusvalorados por el propio concurso de acreedores, ciertamente, pero activos a fin de cuentas. Para el ciudadano de la hipoteca, para Juan Español, el asunto es peor: cuando no puede pagar su hipoteca lo pierde todo, piso y, con ello, lo ya pagado.
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