Hace casi cincuenta años comenzó a funcionar una peculiar instalación que hoy se consideraría un auténtico despropósito medioambiental. Sin embargo, los años 60 eran otros tiempos y el teleférico de Ensidesa funcionó cerca de una década arrojando al mar desde los acantilados del Cabo Peñas cerca de dos millones de toneladas de residuos industriales.
|
etiquetas: vertidos , ensidesa , mar , medioambiente