Marta es fea de cojones, pero tiene una virtud. Si me meto seis cervezas y entorno un poco los ojos, es clavadita a Janis Joplin. Y a mí, Janis Joplin me pone. Cuando esto ocurre, la llevo a mi casa, pongo el greatesjits, el de la moto, y allí nos entregamos a casi un minuto de amor desenfrenado.
|
etiquetas: humor