Parece que fue ayer cuando veíamos, en blanco y negro, un anuncio televisivo que recordaba cuán moderno era beber gaseosa. Alguien interpelaba: ¿te acuerdas de cuando bebíamos agua? Eran los años sesenta, vivíamos una ola de crecimiento económico y el agua era refresco de gañanes o destilado para refrigerar el motor del Seat 600, que tanto se calentaba subiendo el puerto de Pajares.
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