“Francamente querida, me importa un bledo”, “Me encanta el olor a napalm por la mañana” “¿Abogado?¿abogadooooo? sal ratita quiero verte la colitaaaa”. La historia del cine está llena de millones de frases de guión, pero sólo unas cuantas permanecen indelebles en el imaginario colectivo. Pero, ¿por qué se nos quedan grabadas esas frases en particular y no otras líneas de los mismos personajes? ¿Qué ciencia esconden las frases memorables que hace que se alojen en nuestra memoria?
|
etiquetas: cine , frases memorables