Simulaciones por ordenador del crecimiento de galaxias durante miles de millones de años han revelado un escenario probable de cómo se alimentan: una versión cósmica de un retorcido torbellino. Los resultados muestran que el gas frío -combustible para las estrellas– se aglutina rápidamente en espirales en los núcleos de las galaxias a lo largo de filamentos, dirigiéndose después a las “entrañas”. Una vez allí, el gas se convierte en nuevas estrellas y las galaxias aumentan su masa. Traducción en
#1.