[C&P]La historia es simple. Fotógrafo ocasional compra cámara. Fotógrafo ocasional rompe cámara. Fotógrafo ocasional llama al servicio técnico de la marca. 300 euros de reparación. Fotógrafo ocasional se cabrea y busca por Internet. Y voilà: ahí descubre que esa avería tan grave se puede solucionar, en realidad, dejando caer una gota de pegamento en un punto estratégico de la cámara. ¿Ciencia ficción? Más bien picardía en tiempos de crisis.
|
etiquetas: reparación , servicio tecnico , maña