Cientos de personas han atacado una comisaría en el sur de China para protestar por la muerte del conductor de una moto-taxi. Es la tercera revuelta popular en menos de un mes en plena antesala de los Juegos Olímpicos, según publica el diario "South China Morning Post". Los manifestantes denunciaban que guardias de seguridad contratados por el gobierno local golpearon hasta la muerte a Ouyang Jiusheng, de 40 años, por negarse a pagarles unos 30 dólares como "tarifa de protección" a cambio de poder seguir utilizando su moto como taxi.
|
etiquetas: ataque , comisaria , china