Quién nos iba a decir que los bellos vasos atenienses de figuras rojas y negras serían de utilidad para la moderna tecnología aeroespacial… Al parecer, la cerámica ática del periodo comprendido entre los siglos VI- IV a.C. posee una estructura molecular que los científicos están estudiando y que podría mejorar los escudos térmicos que protegen a las naves espaciales cuando entran en contacto con la atmósfera. En español, vía:
goo.gl/HbWL4