Una investigación europea revela que las reacciones humanas ante las injusticias se producen de manera automática debido a un aumento de la actividad de la amígdala cerebral. Según el estudio, los hombres muestran una mayor agresividad que las mujeres ante este tipo de situaciones. [...]"Los resultados pueden tener implicaciones éticas porque el uso de ciertos medicamentos puede afectar claramente en las decisiones cotidianas”
|
etiquetas: cerebro , injusticia , amídgala , neurociencia , medicina