La Societat Catalana de Cardiologia (SCC) analizó el año pasado la atención de los infartos y concluyó que se demoraba demasiado el tratamiento. "Constatamos deficiencias en la asistencia y en comparación con otras autonomías y otros países", explica Xavier Bosch, presidente de la SCC y director de la unidad coronaria del hospital Clínic de Barcelona. Los cardiólogos vieron que se hacen menos angioplastias de las que se debería y que hay una mejor atención en el área de Barcelona que en el resto de Catalunya.
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