Cuanto más alto se sube más dura es la caída. The Economist lo recordaba recientemente con respecto a la economía española. Y los responsables del estudio Situación actual y perspectivas de las regiones de España, que realiza la red universitaria Hispalink, lo atribuyen a la situación de la economía catalana. Las previsiones de crecimiento se sitúan en el 1,9% en el 2008, el 0,4% menos que en el total de España (2,3%), según el informe presentado ayer en la Cámara de Comercio de Barcelona.
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