edición general
5 meneos
67 clics

Carta a Felipe

Felipe, perdona, pero eres un ‘pringao’. Desde que te conocí, a tus catorce otoños. Te emocionaste porque cité en clase El hombre tranquilo, de John Ford. ¡Vaya pringado! Disfrutar, adolescente, una película de 1952, con el carca de John Wayne y la pelirroja marisabionda y temperamental de la Maureen O’Hara. Regodearse como un marrano cuando el Wayne y su cuñado, aquel pedazo de carne con ojos del Victor McLaglen, se enmarañaban a puñetazos por los rincones del pueblaco irlandés de Inisfree.

| etiquetas: carta , felipe , enseñanza , columnata

menéame