La bomba lapa que ETA colocó en el segundo vehículo de la Guardia Civil en Calviá el pasado 30 de julio había sido muy bien escondida bajo el asiento del copiloto para evitar que los agentes pudieran detectarla en una rápida comprobación visual, según las fotografías difundidas en exclusiva por RTVE. Las imágenes, tomadas por los artificieros, muestran la bomba minutos antes de que lograran detonarla.
|
etiquetas: bomba , calvià , eta