El camino que lleva a Belén baja hasta el valle escoltado por policías israelíes, jeeps, muros de hormigón. A un lado y al otro de la carretera, en las zonas donde no hay ni valla de alambre y púas que frene la vista, las colonias salpican el paisaje, moles de viviendas ya habitadas y andamios y hormigoneras para ampliarlas. Si Santa Helena no se equivocó situando los Santos Lugares, hoy los pastores podrían ir a visitar al Niño Jesús sin cruzar checkpoints,
|
etiquetas: belen , mentiras , villancicos , cristianos