El empacho de ladrillo y suelo del grupo BFA-Bankia, con un volumen de activos tóxicos de 31.799 millones, delata a Bancaja ante sus otros seis socios. El entramado interminable de participadas y sociedades ligadas al ladrillo que aportó la caja levantina al SIP es el gran sustento del agujero inm
|
etiquetas: bancaja , bankia , ladrillo , activos tóxicos