Infartos, ataques al corazón y numerosos trastornos son el resultado común de una destrucción masiva de células y tejidos llamada necrosis. Es un hecho violento: Como cada célula muere, las rupturas de sus membranas, liberan sustancias que desencadenan la inflamación, que a su vez puede provocar necrosis celular. Un nuevo estudio del Instituto Weizmann puede ayudar a desarrollar terapias específicas para el control de la destrucción de los tejidos como resultado de la inflamación y necrosis. Traducción en
#1