Si no es el mejor piloto del mundo, tiene que estar entre los cinco mejores por lo menos. No me canso de ver la increíble perfección de este aterrizaje de emergencia: ni un milímetro de desvío de la línea de aterrizaje, ni una chispa... Desde luego el pasaje puede estar pagando copas a este piloto hasta que se jubile. Ya quisieran muchos hacerlo así con las ruedas puestas...
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