La próxima parada es el Atlántico. Sí, literalmente, el destino (final) de los viejos vagones del subte de Nueva York es el fondo del mar y por una buena causa: para crear arrecifes artificiales para dar hogar a miles de peces y moluscos. En 10 años ya se hundieron en el Altántico más de 2000 enormes carros. Fotos de Stephen Mallon:
www.stephenmallon.com/Photography/Next-Stop-Atlantic/1/