[c&p] Las anomalías congénitas en bebés podrían reducirse a sólo un tercera parte en los páises desarrollados, del 3 al 1 por ciento de los nacimientos. Para conseguir este objetivo en un plazo que no abarcaría más de 5 a 10 años, el director del Texas Institute for Genonic Mecidine de Houston (EE.UU), Richard Finnel, apuesta por hacer hincapié en la deficiente alimentación de las madres, por lo que una correcta ingesta de nutrientes y vitaminas ayudará a evitar estos defectos congénitos.
|
etiquetas: anomalías congénitas , reducirse , richard finnel , alimentación