El estudio, divulgado por la universidad Johns Hopkins, informa que en estos barcos hay niveles de contaminación “extremadamente altos” y muy dañinos. La investigación se centró en cuatro embarcaciones que realizan las rutas Florida-Bahamas, Texas-Caribe occidental y México, Columbia Británica-California y California-México. El diésel que utilizan estas embarcaciones contiene más impurezas y partículas dañinas. El gas natural en los cruceros evitaría está agresión a la salud de los pasajeros.
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