Más del 70% de los africanos dependen de los recursos naturales del continente para su subsistencia. Los daños causados a la tierra y a las fuentes de agua pueden ocasionar desastres económicos. Que ello no suceda depende de los países desarrollados. Si no damos una alta prioridad a la protección medioambiental a corto plazo, lo lamentaremos nosotros y lo sufrirán los más desarraigados del Globo que se mueres, literalmente de hambre y sed. Fuente:
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