El esquema utilizado revela claramente las duras tensiones existentes entre los modelos de apertura y cierre para periódicos en la red. El modelo es sencillamente ridículo: si eres suscriptor de la versión papel, si entras desde algunos dispositivos, si lees solo las portadas, si te portas bien o si te has cepillado los dientes, te dejamos entrar.
|
etiquetas: medios , suscripciones , cerrado