1- Manual de cocina: Fondos. Fondo blanco

Como veo que sois muchos los meneantes que usáis este sub, y veo muchas buenas intenciones e ideas, me he decidido a escribir este artículo para explicar ciertos conceptos básicos desde la perspectiva profesional (si, soy cocinero...¿que pasa?) que no veo que se toquen mucho, desde la creencia de que eso os ayudará a comprender dichos conceptos y a modificar, copiar, inventar y conseguir en resumen, recetas un 100% mas riconudas... y quizá también os ayuden a atraer a alguna incauta o incauto con vuestra cocina y dejar menéame y tener vida, amigos, hijos... esas cosas.

Vamos al lío, los fondos creo que deben ir primero porque son la base de... todo. Hoy, fondo blanco.

Un fondo es una preparación que sirve de base para otras preparaciones. No es lo mismo, por ejemplo, hacer una caldereta de pescado agregando agua a la cocción que agregando un caldo o fondo de pescado también llamado "fumet". No es lo mismo elaborar un guiso de carne añadiendo agua que caldo de carne. La diferencia es brutal, ¿se entiende lo que es un fondo y para qué vale?

Podéis cocinar con caldos preparados tipo "Gallina Clueca" que son un resuelve para comer solo si eres un tipo triste y solitario, pero esos sabores estandarizados que todos conocemos no harán que los hombres os tengan envidia ni que las mujeres os persigan para daros su teléfono. Hagáis lo que hagáis, nunca uséis esos diabólicos cubitos de caldo concentrado. Son solo sal y porquerías y cada vez que haces chup-chup muere un gatito.

Voy a contaros como elaborar un sencillo fondo, que hay decenas. Los mas clásicos, fáciles y versátiles son el fumet y fondo blanco.

Fondo blanco.

-Necesitas huesos de ternera, que encontrarás en cualquier carnicería o súper con solo pedir "huesos". Hay que meterlos en la nevera sumergidos en agua y dejar que se desangren. Déjalos toda la noche y cambia el agua sanguinolenta cuando te vayas a trabajar. Suena cruel, pero piensa que la vaca ya está muerta y tú aún tienes que ir al curro... y lo que te queda.

-Coge una marmita alta, o en su defecto (no tendréis este aparato) la olla mas alta y estrecha que encontréis. Nos interesa una cocción lenta y duradera, por eso un recipiente alto y estrecho que evapora menos es lo ideal, no vamos a añadir agua durante la cocción.

-Como no tienes nada alto y estrecho, coges un recipiente cualquiera (grande), lo llenas de agua y metes dentro los huesos acompañado de unos vegetales cortados en mirepoix. La mirepoix que enlazo es un corte muy grande para lo que queremos, solo es para que sepáis que es cortada, no picada...Cebolla cortada a la mitad y cada mitad de la cebolla cortada en 4, una zanahoria generosa cortada en 3-4. Trozos grandes, no trabajéis mas de lo necesario. Chas-chas-chas... padentro.

-Unos granos de pimienta negra al gusto, una rama de apio si te cae mal algún comensal alérgico (cuidado, fuera bromas, el apio es un alérgeno. Prescinde si tienes dudas).

-Es aconsejable pelar la cebolla y la zanahoria antes de cortar. Espero que hayas leído este punto antes del anterior.

-En las hojas verdes de un puerro, haces un bouquet garni, con laurel, tomillo y perejil. Esto de la foto, pero con las hierbas que te he dicho. Ya experimentarás cuando te cases, si te dejan.

-Ata el bouquet garni con una cuerda, como si fueses a secuestrarlo para meterlo en un maletero. Esto impide que se le salgan los interiores, ya que seguro que no tienes un colador o chino apropiado para filtrar todas las pequeñas partículas que querrán escapar. Nos interesa un líquido limpio de impurezas. Aprovecho para decir que no, un pasapuré no es un colador ni un chino. No vale.

-Una vez metidos todos los ingredientes en la marmita olla perol lo que sea (no antes, debe empezar a calentar desde agua fría) y cargado de agüita fresca de la fuente, pon el fuego a tope hasta que hierva. A borbotones.

-Cuando hierva a borbotones es el momento de bajar el fuego, hasta el punto que hierva al chup chup o poco mas. No debe evaporar muy rápido. Desespuma (normalmente mas de una vez, puedes escuchar un podcast mientras vigilas), tapa.

-Deja cocinar todo el tiempo del mundo. 2 horas... 3... 4.... toda la noche... No te preocupes de nada, tú déjalo reducir. Bueno, preocúpate porque no se evapore todo el líquido, que si se evapora se te quema el piso y vienen los GEO...unas horas... no te pases, Arguiñano.

-Cuando estés satisfecho, se haya concentrado y el olor inunde tu cocina, apaga, retira huesos y verduras (tíralas) y baja al chino mas cercano a comprarte un buen colador o un chino apropiado. Pensarás que soy un cabrón por hacerte atar unas hierbas a un pobre puerro con la excusa de que no escapen siendo innecesario, pero en el proceso has aprendido a hacer un bouquet garni y a secuestrar a un ser humano. Ya me lo agradecerás.

-Una vez colado, ese caldo te sirve para hacer cualquier plato o salsa de carne. Donde la receta te diga "añade tanto de agua" tú sonríes y añades un rico fondo blanco. Desglasa la bandeja de la carne asada con ese líquido, haz un consomé, engaña a tu cuñado vegetariano añadiéndolo a una crema de verduras para mofarte de él cuando te diga lo rico que estaba... las posibilidades son infinitas.

- Dura unos 4 días en la nevera, pero puede congelarse.

-No lleva sal. Nunca. Ya echarás sal cuando cocines lo que sea... le echas el fondo, dejas cocer y cuando esté listo rectificas de sal. El fondo no la lleva, porque vas a cocinar con él y no queremos que sales unas verduras, su carne, y después le añadas fondo salado. Too much sal for the business.

-Sustituye los huesos por unas carcasas de pollo y cueces en el caldo resultante unas verduritas y fideos para tener una sopa de pollo. La carne resultante sirve para unas croquetas o para una deliciosa velouté de pollo reina (los entendidos pillarán la broma), receta que dejaremos para otro día, cuando me anime a explicaros el principio de las cremas ligadas a partir de un roux.

-Cuando cualquier comensal diga "¡que rico este guiso!...¿qué lleva?" tú miras a la mas guapa de la reunión y como sin gran interés, quitando importancia, dices:

Pse... nada especial... el secreto está en buenos ingredientes con un simple fondo blanco de verduritas en mirepoix y un bouquet garní de hierbas aromáticas. Y sobre todo, hacerlo con mucho, MUCHO amor. (guiño guiño).

Es recomendable que te atuses un bigote fino e imites acento francés mientras dices estas gilipolleces. Aunque siempre corres el riesgo de que la guapa pase de ti y te ponga ojitos el maromo del otro lado de la mesa.

-En fin... nadie es perfecto.