Una mujer con una enfermedad autoinmune de riñón (lupus nefrítica) viajó a Tailandia para recibir una tratamiento experimental, la inyección de células madre, que supuestamente debería curarla. Ahora esta muerta. La causa: el tratamiento. Las pruebas clínicas en pacientes con la misma dolencia muestran que la inyección de células madre en la sangre, tras haber suprimido el sistema inmune con potentes drogas, hacen que éste se regenere y cesen los ataques al riñón. Pero no le inyectaron en la sangre, sino en el mismo riñón, [sigue en
#1]