¿Hasta qué punto está condicionada la información que recibimos? Cibernéticamente hablando, cada uno de nosotros vivimos en nuestra propia burbuja de información, The Filter Bubble. El problema está en que no elegimos que noticias llegan a nosotros, o peor, dejan de llegar. La mayoría son colocadas estratégicamente en nuestro entorno online por "robots" que tras analizarnos, deciden que debemos o no debemos saber.