Según la Ley General Tributaria,el límite de las transferencias sin declarar está fijado en 10.000 euros.La mayoría de entidades bancarias fijan este límite en 6.000 euros, aunque Hacienda siempre podría revisar cualquier transferencia que le pueda parecer sospechosa.Puede darse el caso de que necesitemos transferir una cantidad igual o superior a 10.000 euros. Lo cierto es que nada nos lo impide, lo único que debemos considerar es que, si recibimos dicha cantidad en una sola transferencia, debemos reflejarlo en la declaración de Hacienda