Unos investigadores afirman haber hallado el ‘Santo Cristo de Maracaibo’, con sus bodegas llenas de oro y plata, hundido en el siglo XVIII en las islas Cíes. Nos ponemos en situación. El 22 de septiembre de 1702, unos galeones españoles cargados de oro y plata de América, al mando del almirante Manuel de Velasco y Tejada, se refugian en la ría de Vigo. Su escolta de barcos franceses le avisa de que una flota procedente de Inglaterra y de la Provincias Unidas (germen de los actuales Países Bajos) están al acecho y buscan el tesoro.